- "Yo no podría estar con una pareja de derechas, de verdad os lo digo..."
Bueno, habría que verla si un George Clooney le tirara los tejos, que todos sentenciamos no sin saber de la misa la mitad, ni siquiera si tenemos el libro del derecho o del revés, a fin de cuentas sólo hay que repetir lo que otro dice para no ser expulsado, o murmurar si no lo entiendes, o callar, que uno callado más parece por exceso que por defecto si lo hace bien, pero llevar la contraria por ser incapaz...Como que no vale.
Es una mujer que está a punto de cerrarse las puertas de salida por voluntad propia, en el caso de que esto siga siendo posible en un mundo que huye del silencio como si fuera la muerte; está con un tío de su misma edad e ideología, pero él la lleva de otra manera, no parece darle tanta importancia, al menos no como para sacar el tema una madrugada de domingo, no son horas ni sitios, pero hay mujeres a las que esto no les importa: es como si permanentemente tuvieran que ajustar cuentas con el pasado que no pudo elegir, mejor si alguien las oye. Y por ajustárselas, sigue viviendo dentro de ellas.
Recuerdo que otra noche la oí hablar del tema sexual con la chica de la otra pareja, ellos estaban de fútbol y tal, acababan de conocerse, pero al fijarme más en el como que en lo que decía me di cuenta de que ahí había una cierta impostura, como si ella misma siguiera creyendo que no son temas para una señorita, como si los rescoldos de aquella educación y costumbres no hubieran sido totalmente limpiados por más lejías y detergentes que haya usado, que ya se sabe que siempre mienten, llevan décadas haciéndolo, "¡aún más blanco!", nada lo está la segunda vez. Y las bacterias sobreviven en el espacio exterior, ¡qué no harán con la lejía Conejo!
Por eso la clave de todo está en la educación que reciben quienes vienen detrás de nosotros. Y por esto los que quieren mandar sin la posibilidad de perderlo todo en el intento prefieren controlar esa parcela antes que tener ejército propio. Incluso que televisión.
A nosotros, los que nacimos cuando Franco se estaba muriendo, ya nos importó poco el tema político, así que ahora, viendo a los que vienen, ni os cuento. Y si alguna vez parece otra cosa es más por no quedarse fuera que por gusto de lo que hay dentro. Afuera están los padres, los enemigos naturales cuando la tuya está en el proceso de cocción a la forma que le dieron. Tiempo, proporción y temperatura. Siempre contesto a quienes me preguntan que para hacer un buen arroz sólo necesitas un reloj, matemáticas básicas y conocer el fuego donde vas a cocinarlo.
Si nuestra norma fue el pasotismo no significa que no hubiera excepciones, claro, pero tengo la sensación que más era porque no podían ser como todos queríamos ser, es decir, populares, de esos que con toda facilidad se llevaban a la chica más guapa que hubiera sin necesidad de haber leído nada, de seguir a un determinado grupo musical o de saber algo de cine del bueno. Para ellos, para los elegidos, eso era tan sencillo como casi nada para el resto. Uno se sale del camino principal porque no lleva el calzado adecuado. Eso es todo.
Pero hay quienes terminan creyendo que el nuevo es el bueno, al menos para ellos, y siendo así puede que también lo sea para los demás, que lo natural deja de serlo cuando el no puedo pasa a significar no es bueno.
A uno de estos, un amigo mío, un profesor, le descubrieron una rara enfermedad hace unos meses. No es que sea mortal, pero sí crónica. Y de las molestas; no tanto por el dolor sino por las precauciones a tomar para no sufrirlo: muchas horas en el hospital cada pocos días.
Al principio se lo tomó bastante bien, es un tío muy animoso, y no hay subidón comparable al sentir como se va el dolor, que llegó jodido a Urgencias, y si enseguida le comunicaron el motivo no lo hicieron de tal manera que le afectara demasiado, que las cosas malas hay que decirlas poco a poco, y las buenas casi que también. Crónico, pero controlable, vida normal...y todo lo demás.
En fin, que cada vez lo veo menos animoso y más preocupado, ni la mitad de la vida y ya con el freno de mano y una marcha metía. Y no es que haya sido un destroyer, al contrario, está muy concienciado de todo y casi que de todos, y lo más curioso es que llevaba un año sin fumar, ahora ha vuelto aunque no debe, pero le hace más bien que mal, como esas embarazadas a las que un buen doctor les dice que mejor se echen tres pitos diarios que estar al borde de la taquicardia.
No sé porqué salen esas cosas, ni puta idea...pero no puede ser bueno estar todo el tiempo intentando demostrar a todos que todo lo que sabían está equivocado. O casi.
Nietzsche probó de todo para curar su mal.
No supo dejarlo a tiempo, como tantos otros.
Hay señales en todos los caminos...
Pero a veces tu música suena tan bien que es como si estuvieran en arameo.
Muy bueno lo nuevo de Sabbath: